Las dos uvimóviles que los Bomberos del Ayuntamiento de Zaragoza desplazaron al lugar de los hechos evacuaron al hospital Miguel Servet a los dos heridos en la reyerta. Diego G. G. padece una herida por disparo en la rodilla izquierda y su pronóstico era reservado, según explicaron fuentes del Gobierno de Aragón. Su esposa Cristina sufrió cortes y contusiones en la cara, aunque el carácter de sus heridas era leve.
Los heridos llevan unos años casados y son padres de dos niños de corta edad, según explicaron varios vecinos de la zona y familiares, que añadieron que la pareja era cliente habitual del bar El Rincón.
"Esto hay que hablarlo, esto no puede ser", comentaban algunos de los jóvenes que viven en la zona mientras iban conociendo detalles de lo sucedido al tiempo que contemplaban el dispositivo policial desplegado tras la agresión.
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