Zaragoza.- Unos 65 participantes en la categoría de bomberos y algo más de 65 atletas en la open han participado este domingo por la mañana en la primera etapa del segundo circuito nacional de carreras verticales que se ha celebrado en el World Trade Center de Zaragoza. A la misma han asistido corredores de todos los puntos de la geografía española. Las siguientes etapas se disputarán en Valencia y Barcelona.
El objetivo de la prueba era el de subir 20 pisos del edificio en el menor tiempo posible y, en el caso de los bomberos, equipados con su traje de intervención. Los participantes han recorrido un primer desplazamiento horizontal para bajar hasta los aparcamientos del edificio y comenzar el ascenso hasta la planta 17, en la que estaba la meta. Todos ellos han realizado el recorrido de forma individual con un intervalo de 45 segundos entre cada participante.
A las 10.00 horas ha comenzado la prueba para los participantes de la primera categoría, los bomberos, en la que se ha proclamado vencedor el madrileño Mario Verdugo, con un tiempo de tres minutos y trece segundos.
En la prueba open ha sido el valenciano Ignacio Cardona, que figuraba entre los favoritos, el que ha quedado en el primer puesto, con un tiempo algo superior al de Verdugo: Tres minutos y 31 segundos.
En mujeres, Judith Corachan ha marcado el mejor tiempo con cuatro minutos y un segundo.
Una prueba muy explosiva
Varios participantes han asegurado que no se han preparado mucho para la prueba, mientras que otros han remarcado que llevan entrenando mucho tiempo para enfrentarse a este tipo de retos.
Uno de los bomberos que han subido los 20 pisos del World Trade Center ha explicado que el problema es “que la prueba es muy explosiva, es muy poco tiempo pero es muy dura y te fallan las piernas”. Otro de los participantes ha remarcado que para él el problema es que “hay muy pocas carreras de este tipo”.
También hay quien ha señalado que “hay que tomárselo un poco con tranquilidad porque si no acabas muy roto cuando llegas a la meta”.
Además, algunos han explicado que la prueba de este año ha sido “más difícil porque la gente viene muy preparada y hay mucho nivel”. Esto se debe, en el caso de los bomberos, a que muchos de ellos están entrenando para las olimpiadas mundiales de policías y bomberos que se celebran a finales de agosto en Nueva York (EEUU).