El Archivo Municipal del
Ayuntamiento de Valladolid expone desde este viernes un total de 96 piezas
entre objetos, imágenes y documentos históricos en las que se repasan los 500
años de historia de los cuerpos de lucha contra incendios en la ciudad, desde
los 'Matafuegos' musulmanes del Siglo XVI hasta el actual servicio de Bomberos.
Ampliar foto La muestra ha sido presentada este viernes por el alcalde de
Valladolid, Óscar Puente, y el director del centro archivístico, Eduardo
Pedruelo, después del trabajo durante más de un año por parte de personas tanto
usuarias como no usuarias del Archivo.
La exposición se mantendrá
abierta hasta el 31 de agosto de 2016 la historia de los 'Matafuegos' de
Valladolid, germen del cuerpo de Bomberos de la ciudad formado por carpinteros
musulmanes, a través de la exposición de 96 piezas en la que, con motivo de su 500
Aniversario, colaboran el periódico El Norte de Castilla y el Instituto
Universitario de Historia Simancas.
Como ha recalcado Puente, este
retén, evolucionó a lo largo de los siglos hasta convertirse en un cuerpo
profesional integrado en los servicios municipales y asumir nuevas funciones, a
parte de la extinción de incendios, como las de salvamento y protección civil.
El 5 de enero de 1505 la reina
Juana I concedía una carta de Merced por la que confirmaba la exención del pago
del tributo de aposento a un grupo de treinta carpinteros musulmanes, vecinos
todos del barrio de Santa María, a cambio de que fuesen con sus herramientas a
apagar los fuegos que surgiesen en la villa en oyendo las campanas o en siendo
llamados por el concejo.
De hecho, los 'matafuegos'
originales, que eran de origen musulmán y ejercían estas funciones a cambio de
la exención de un tributo y del cobro de 2.000 maravedíes anuales, se
mantuvieron sólo hasta 1610, cuando las personas que provenían de esta creencia
pese a que se habían convertido al cristianismo fueron expulsados de España. En
ese momento, la competencia pasó a ser de la Cofradía de San José, a la que en
lugar de dinero en metálico se le aportaban dos toros para los festejos de su
patrón.
Las 96 piezas que, entre
documentos y objetos, componen la exposición recrean este camino cinco veces
centenario y aportan información sobre los cambios experimentados en la lucha
contra el fuego en cada época; tanto en los medios humanos, como en los
materiales, en los protocolos de actuación y en la propia organización del
servicio y su conexión con el municipio y la sociedad.
Puente y Eduardo Pedruelo han
subrayado que los fondos proceden "casi de forma exclusiva" del
Archivo municipal, aunque también han colaborado y aportado el Museo de
Valladolid, la Fundación Joaquín Díaz, los Bomberos de Palencia, el Museo de
Bomberos de Zaragoza y el Museo de la Ciencia.
Pedruelo ha detallado que el
personal del Archivo trabaja desde hace más de un año en esta iniciativa, con
motivo del 500 aniversario de los Bomberos de la ciudad que se conmemora
durante todo este año. A través de ello, ha explicado el director, han podido
conocer "mucho" sobre la historia de la ciudad y ahora pueden darlo a
conocer, lo que encaja con uno de los cometidos de este centro.
La exposición está dividida en 5
capítulos. En el primero se analizan las causas que, históricamente, han
motivado la mayor parte de los incendios habidos en la ciudad. En los cuatro
restantes se analiza la evolución del servicio, desde el primer cuerpo formado
por carpinteros musulmanes (Siglo XV a 1610), y sus sucesores, los maestros de
obras cristianos (1610-1833), hasta la azarosa creación del servicio municipal
contra incendios (1833-1973), para finalizar con una panorámica de los bomberos
del siglo XXI.
En la exposición se podrán
contemplar documentos de gran valor, como el privilegio por el que Alfonso XI
concede a la ciudad de Valladolid los títulos de 'Buena y Leal' que todavía
ostenta, a resultas del incendio del monasterio de las Huelgas Reales; o un
privilegio de Juan II dirigido a las comunidades de moros, judíos y cristianos
de la villa que contiene la representación más antigua que se conoce del escudo
de armas de Valladolid.
También se expone el libro en el
que se recogen las disposiciones originales, cédulas y reales provisiones, que
Felipe II dio para la reconstrucción de la villa después del incendio de 1561,
así como otros documentos más recientes en los que quedan reflejadas, por
ejemplo, las importantes reformas introducidas por Juan Agapito y Revilla,
arquitecto municipal y responsable del servicio durante más de 30 años. Entre
estos documentos destacan las numerosas fotografías, algunas inéditas, que
ilustran la muestra.