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| Foto: Marta Garú |
Heraldo de Aragón. M.A. Coloma
Un conductor que circulaba ebrio causó ayer un grave accidente al perder el control de su turismo, remontar una de las aceras del puente de Santiago y atropellar a un joven de 15 años. La víctima tuvo que ser trasladada de urgencia al Hospital Clínico, donde ingresó con fractura de pierna y brazo. Presentaba también un fuerte golpe en la cabeza, por lo que ha pasado la noche en observación. El responsable del accidente fue detenido y trasladado al cuartel de la Policía Local de Zaragoza, donde se sometió a la prueba de etilometría y arrojó una tasa de 0,86 mg/l de alcohol en aire espirado.
El atropello se produjo alrededor de las 17.45, en la parte del puente más próxima al cruce con Echegaray y Caballero. Según el atestado policial, el conductor circulaba en dirección al Actur cuando, probablemente a causa de su estado etílico, dio un volantazo y remontó la acera. En ese momento había una gran cantidad de personas paseando por los laterales del puente. Entre ellas, un grupo de tres amigos entre los que se encontraba la víctima. Según explicaron los testigos, el joven herido llevaba un monopatín, al igual que sus dos acompañantes. Como consecuencia de la fuerte embestida, su tabla terminó dentro del habitáculo del turismo.
Un fuerte golpe en la cabeza
Una uvi móvil del Cuerpo de Bomberos prestó la primera asistencia sanitaria a la víctima en el lugar del accidente. Tras conseguir estabilizarlo, lo trasladaron al hospital Clínico, donde ingresó con lesiones de pronóstico grave. Los médicos querían comprobar si el fuerte golpe recibido en la cabeza había tenido alguna consecuencia, por lo que decidieron mantener al paciente en observación toda la noche.
Al cierre de esta edición, todavía no se conocía la identidad del conductor causante del atropello. Según los primeros testimonios recogidos por los agentes que instruyen el atestado, no parece que esta persona circulara a una velocidad muy superior a la permitida o de una forma temeraria. De hecho, fuentes oficiales confirmaron que no se le iba a imputar este delito. Explicaron también que tiene el carné de conducir en regla y carece de antecedentes.
En cualquier caso, el hombre fue arrestado y trasladado al cuartel de La Paz para tomarle declaración y someterle a la prueba de impregnación alcohólica. Por encima de una tasa objetiva de 0,60 mg/l, se considera que el conductor ha cometido un delito de conducción bajo la influencia del alcohol. Y como el hombre arrojó una tasa de 0,86 mg/l, se le ha imputado dicho delito. También tendrá que ser juzgado por un delito de lesiones por imprudencia.
La Policía Local recopilará ahora los testimonios de los testigos y de la propia víctima, cuando se recupere. Junto con los croquis y mediciones tomados en el lugar del accidente, estas declaraciones serán remitidas al juez encargado de instruir el caso.
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