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Dos hermanos perdieron la vida y su padre resultó con heridas graves en un accidente que se produjo a última hora de la noche del jueves en un cruce de la N-II, próximo al área de servicio de Rausán, que está considerado uno de los peores puntos negros de la red viaria aragonesa. Esa misma intersección, en Alfajarín, a las puertas de Zaragoza, fue escenario de otro accidente en el 2002, cuando un autobús fue embestido por un tráiler, con un resultado de quince heridos, dos de ellos de gravedad.
El último siniestro se produjo cuando el turismo en el que viajaban las víctimas, todas ellas residentes en Guipúzcoa, irrumpió en la calzada procedente de una raqueta de giro. Su intención era incorporarse a la ronda norte, pero un camión que pasaba en ese momento por la carretera general lo alcanzó de lleno.
Como consecuencia del impacto, ocurrido en el kilómetro 341,4, fallecieron los hermanos Joel y Jorge R. S., de 32 y 41 años y residentes en Getaria y Zarautz, respectivamente. Su padre, José León R. Q., de 66 años y vecino de Zarautz, sufrió lesiones graves y fue trasladado al hospital Miguel Servet.
SIN NIEBLA El punto de la colisión es una especie de rotonda que permite entrar a un polígono y cambiar de sentido. Los vehículos que efectúan el giro deben respetar una señal de stop antes de salir a la N-II, según indicaron ayer en la Guardia Civil de Tráfico en Zaragoza. Se desconocen las causas que motivaron el accidente, pero está descartado que hubiera niebla en el momento de la colisión.
"Es un tipo de accidente que, por desgracia, se produce con cierta frecuencia en ese mismo cruce", añadieron las mismas fuentes. "Un vehículo no respeta el stop, sale a la calzada y es alcanzado por otro que circula correctamente", precisaron.
Ese mismo cruce fue escenario en marzo del 2002, cuando un autobús de pasajeros que se dirigía a Barcelona cruzó la carretera y fue golpeado en un lateral por un camión Debido a la fuerza del impacto, el autobús volcó y catorce pasajeros sufrieron lesiones, uno de ellos de gravedad.
A su vez, el chófer del camión quedó atrapado en la cabina, con heridas igualmente graves, mientras que el conductor del autobús, que salió ileso, pidió ya entonces que la intersección se regulara con semáforos.
El último siniestro se produjo cuando el turismo en el que viajaban las víctimas, todas ellas residentes en Guipúzcoa, irrumpió en la calzada procedente de una raqueta de giro. Su intención era incorporarse a la ronda norte, pero un camión que pasaba en ese momento por la carretera general lo alcanzó de lleno.
Como consecuencia del impacto, ocurrido en el kilómetro 341,4, fallecieron los hermanos Joel y Jorge R. S., de 32 y 41 años y residentes en Getaria y Zarautz, respectivamente. Su padre, José León R. Q., de 66 años y vecino de Zarautz, sufrió lesiones graves y fue trasladado al hospital Miguel Servet.
SIN NIEBLA El punto de la colisión es una especie de rotonda que permite entrar a un polígono y cambiar de sentido. Los vehículos que efectúan el giro deben respetar una señal de stop antes de salir a la N-II, según indicaron ayer en la Guardia Civil de Tráfico en Zaragoza. Se desconocen las causas que motivaron el accidente, pero está descartado que hubiera niebla en el momento de la colisión.
"Es un tipo de accidente que, por desgracia, se produce con cierta frecuencia en ese mismo cruce", añadieron las mismas fuentes. "Un vehículo no respeta el stop, sale a la calzada y es alcanzado por otro que circula correctamente", precisaron.
Ese mismo cruce fue escenario en marzo del 2002, cuando un autobús de pasajeros que se dirigía a Barcelona cruzó la carretera y fue golpeado en un lateral por un camión Debido a la fuerza del impacto, el autobús volcó y catorce pasajeros sufrieron lesiones, uno de ellos de gravedad.
A su vez, el chófer del camión quedó atrapado en la cabina, con heridas igualmente graves, mientras que el conductor del autobús, que salió ileso, pidió ya entonces que la intersección se regulara con semáforos.
Foto: Archivo Fotográfico de Bomberos Zaragoza. J. C. Garza
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